Por Aliaga Rojas Ximena, Huaman Arias y Machuca Diaz Jhann
Jean-Paul Charles Aymard Sartre, nacido el 21 de junio de 1905 en París fue un filósofo, escritor, novelista, dramaturgo, activista político, biógrafo y crítico literario francés, exponente del existencialismo y del marxismo humanista, condensó su pensamiento en una obra en la que sus ideas sobre el Yo y la sociedad fueron claves para el devenir de la psicología. Sartre fue toda su vida un hombre coherente con su pensamiento y sus principios ideológicos, tanto que incluso llegó a rechazar el premio Nobel de Literatura y tomó las armas para luchar por la liberación de Argelia. Este pensador francés está considerado uno de los grandes filósofos del siglo XX y uno de los impulsores de una corriente filosófica conocida como existencialismo ateo. En 1964, su obra fue galardonada con el Premio Nobel de Literatura, un honor que el escritor decidió rechazar.
GARCIN. - Comprendo muy bien que mi presencia sea importante.Y
personalmente preferiría quedarme solo; tengo que poner mi vida en orden y necesito
concentrarme. Pero estoy seguro de que podremos adaptarnos el uno al otro: no hablo, no
me muevo y hago poco ruido. Sólo que, si puede permitirme un consejo, tendremos que
mantener entre nosotros una extremada cortesía. Será nuestra mejor defensa.
(A puerta cerrada, 1944, p.13)
Este fragmento encapsula varios temas existenciales y humanísticos. La presencia de otros y la convivencia forzada pueden ser vistos como una metáfora de la vida en sociedad, donde las personas deben encontrar formas de coexistir a pesar de las diferencias y las incomodidades personales. La insistencia en la cortesía puede interpretarse como una estrategia para mantener la armonía en situaciones difíciles. Sartre, en esta obra, explora profundamente las dinámicas humanas y la naturaleza de las relaciones interpersonales, poniendo de relieve cómo la presencia del "otro" afecta nuestra propia existencia y comportamiento.
INÉS. - Hagan lo que quieran, son los más fuertes. Pero recuerden, estoy aquí y
los miro. No les quitaré los ojos de encima, Garcin; tendrá que besarla bajo mi mirada.
¡Cómo los odio a los dos! ¡Ámense, ámense! Estamos en el infierno y ya me llegará el
turno.
(A puerta cerrada, 1944, p.44)
Este fragmento nos hace fijarnos en uno de los temas centrales de Sartre: "El infierno son los otros". La presencia constante de los otros y la incapacidad de escapar de su juicio es lo que constituye el verdadero tormento. Inés, aunque impotente en ciertos momentos, intenta ejercer control y provocar sufrimiento a través de su vigilancia y sus palabras. Esto refleja la naturaleza humana en situaciones extremas, donde la lucha por el poder y la influencia se convierte en una fuente de sufrimiento.
La dinámica entre los personajes resalta cómo el deseo de ser aceptado, amado y comprendido puede ser una forma de esclavitud cuando estamos eternamente bajo el juicio de los demás. Sartre sugiere que la verdadera condena no es un castigo físico, sino la imposibilidad de escapar de la mirada y el juicio de los otros, que perpetúan la alienación y el sufrimiento.
GARCIN. - (tomándola de los hombros). - Escucha, cada uno tiene su objetivo, ¿no
es cierto? Yo me reía del dinero, del amor. Quería ser un hombre. Un valiente. Lo aposté
todo al mismo caballo. ¿Es posible ser un cobarde cuando se han escogido los caminos más peligrosos? ¿Puede juzgarse una vida por un solo acto?
(A puerta cerrada, 1944, p.53)
Garcin habla de sus objetivos y de cómo se reía del dinero y del amor, sugiriendo que buscaba algo más profundo o significativo en la vida. Su objetivo principal era ser un hombre valiente. Sin embargo, ahora se enfrenta a la contradicción de sus acciones y sus aspiraciones. Se pregunta si es posible ser considerado un cobarde cuando se ha optado por los caminos más peligrosos, lo cual es una reflexión sobre la complejidad del carácter humano y la naturaleza de la valentía.
GARCIN. - Tú sabes lo que es el mal, la vergüenza, el miedo. Hubo días en que te
viste hasta el corazón, y eso te destrozaba brazos y piernas. Y al día siguiente ya no sabías
qué pensar, no llegabas ya a descifrar la revelación de la víspera. Sí, tú conoces el precio
del mal. Y si dices que soy un cobarde, es con conocimiento de causa, ¿eh?
(A puerta cerrada, 1944, p.52)
Este fragmento nos invita a reflexionar sobre la complejidad del autoconocimiento y la naturaleza humana. Garcin habla de una lucha interna profunda, donde enfrentarse a los propios defectos y debilidades puede ser una experiencia devastadora y confusa. La mención de la cobardía también es significativa. Reconocer la propia cobardía, y ser reconocido como tal por alguien que comprende plenamente lo que eso significa, requiere un grado de honestidad brutal. Esto puede ser visto como una forma de expiación o de aceptación de la propia humanidad imperfecta.
En resumen, este pasaje nos recuerda que el enfrentamiento con el mal y la debilidad interna es una parte inevitable de la condición humana, y que la comprensión y la aceptación de estos aspectos pueden ser tanto dolorosos como liberadores.
REFERENCIAS:
Sánchez, M. , & Sánchez, M. C. (2021, 25 mayo). «A puerta cerrada», en busca de sentido. Clarín. https://www.clarin.com/opinion/-puerta-cerrada-busca-sentido_0_i1mFQxSmB.html
Santi. (s. f.). (2012, 3 de mayo) Jean Paul Sartre: A puerta cerrada. https://unlibroaldia.blogspot.com/2012/05/jean-paul-sartre-puerta-cerrada.html
Velarde, S. (s. f.). (2017, 20 de marzo) Crítica: A PUERTA CERRADA. https://eloficiocritico.blogspot.com/2017/03/critica-puerta-cerrada.html
Ver todas las entradas de @sebasarena & @sebasarena. (2020, 22 junio). A puerta cerrada [reseña literaria]. J.S.A.A. [Opinión Personal]. https://jsaaopinionpersonal.wordpress.com/2020/06/22/a-puerta-cerrada/
Vidal, R. (2018, 9 mayo). A puerta cerrada: la náusea sartreana y el infierno tan temido. La Izquierda Diario - Red Internacional. https://www.laizquierdadiario.com/A-puerta-cerrada-la-nausea-sartreana-y-el-infierno-tan-temido
No hay comentarios.:
Publicar un comentario